Revisión de literatura completa



“Procedencia del migrante y racismo”

Objetivo: “Verificar si la procedencia del migrante se relaciona con un mayor o menor racismo”

La migración es un fenómeno que ha estado presente en todos los tiempos, y con mayor notoriedad en la actualidad. Este fenómeno de la migración se refiere al “efecto o acción de pasar de un país a otro para establecerse en él” (Machín, 2012, p.9). Las razones de esta movilidad son múltiples, y en cierta medida depende de la región de origen. Por esta razón, la migración en Chile se ha convertido en el gran desafío de las políticas públicas relacionadas con extranjería, ya sea para el ámbito nacional como para los gobiernos locales o municipales. Según el último reporte del Departamento de Extranjería y Migración del 2016, al año 2014 la población migrante correspondía a un 2,3% de la población total en el país.  De esta manera, la última cifra proporcionada por el DEM estaría doblando la población migrante registrada en el año 2002 por el Censo de población, pasando de 184. 464  a 410.998 migrantes (Lafortune & Tessada, 2016). En este panorama, se constata que la mayoría de la población migrante es de origen intrarregional, es decir, proviene de otros países sudamericanos. Según datos del DEM, nos dice que en el año 2014 un 74, 9 % corresponde a sudamericanos (Rojas- Silva, 2016).Ahora bien, el nivel de inserción social de la población migrante en los distintos ámbitos muestra diferencias considerables. No todos los migrantes viven de la misma manera, de acuerdo a las diversas esferas: la acogida, el acceso a la salud y al mundo laboral. Las causas de dichas experiencias pueden estar en el nivel académico, en el origen, en lo etáreo, o incluso en el color de piel. En relación a los factores antes señalados, encontramos una limitación no menor, esto es, que los últimos datos censales que poseemos son del 2002, lo que podría proporcionarnos una información poco vigente, ya que, el origen de los flujos migratorios intrarregionales ha variado en el último tiempo. En este marco, el objetivo de la siguiente revisión del literatura es evaluar si la procedencia del migrante se relaciona con un  mayor o menor racismo. Para verificar esto, se compararán resultados de informes, encuestas y estudios que abordan el fenómeno migratorio, datos que serán complementados cualitativamente con artículos que reflexionan sobre la construcción histórica del racismo en la migración, y así verificar nuestro objetivo. Para ello, analizaremos 6 fuentes cuantitativas y cualitativas sobre el fenómeno migratorio y así verificar la relación entre procedencia y racismo, mediante los siguientes pasos: la percepción de los chilenos sobre los migrantes, inclusión de los migrantes según el espacio laboral y discriminación según la procedencia.

Percepción de los chilenos sobre los migrantes.A partir de la constatación realizada por Madero & Mora del Valle, quienes señalan que las sociedades operan con “matrices de estratificación específicas, que distribuyen jerárquicamente a los agentes en virtud de diferentes variables sociodemográficas” (Madero & Mora del Valle, 2011, p. 149), se podría entender cierta inclusión o exclusión de los migrantes en nuestro país, comprendiendo que cada sujeto llega como un recurso social relevante para Chile, pero que debe ser estratificado. Desde este horizonte, podríamos comprender lo que nos señala Machín en el informe “Los derechos humanos y la migración en Chile”, que recoge datos de distintas encuestas, observando que, desde la percepción de los chilenos hacia los migrantes, existe un 54% (de los 300 Santiaguinos encuestados el año 2003) que considera un problema la migración por la pérdida de la identidad nacional, y un 33% de los mismos encuestados, lo considera un problema por la ocupación laboral (2012). Sin embargo, Aravena & Alt en el trabajo “Juventud, migración y discriminación en el Chile contemporáneo”, recogiendo datos de una serie de grupos de discusión sobre la temática de los imaginarios sociales del otro en el Chile contemporáneo, presenta a la juventud chilena con bajos niveles de discriminación con respecto a los extranjeros (2012).Comparando las tres fuentes señaladas anteriormente, se observa una cierta identificación entre la fuente 1 (Madero & Mora del Valle) y 2 (Machín), aunque desde distintas perspectivas, ya que la 1 profundiza en el fenómeno migratorio mediante un análisis reflexivo sociológico, mientras que la 2 lo hace a través de las encuestas, para coincidir ambas en que la sociedad chilena no permite una inclusión inmediata y plena, situando al migrante en un estrato. Por su parte, la fuente 3 (Aravena & Alt) difiere de las dos anteriores, pues se concentra en la percepción de la población chilena joven, quienes se presentan menos intolerantes a los migrantes. Por lo mismo, las fuentes señaladas presentan limitaciones, ya que al no estar completamente vigentes carecen del aporte de las generaciones de chilenos más jóvenes, quienes podrían estar configurando la percepción del migrante registrada en nuestras fuentes.

Inclusión de los migrantes según el espacio laboral.Es relevante lo señalado por Madero & Mora del Valle, para referirse a la inclusión de los migrantes, pues según ellos, éstos se vinculan mayormente al mundo laboral de modo informal, debido a las trabas institucionales de nuestro país. Asimismo, esta inserción significa ocupar plazas laborales que no consideran el capital cultural del migrante, y que los expone a plazas laborales inestables y de bajo status (2011). Esta precariedad laboral también es comentada por Machín (2012), quien señala que los migrantes se desempeñan sobretodo en el “sector privado como empleados, sólo un porcentaje mínimo es empleador... Del porcentaje de personas empleadas, un número significativo carece de contrato de trabajo…” (p. 44). Por su parte, Aravena & Alt, concuerdan con esta constatación y percepción desde el mundo migrante, esto es, que la inclusión a través del espacio laboral tiene un alto costo, pues deben aceptar salarios mínimos, sobrecarga laboral, y estar dispuestos a demostrar constantemente las propias habilidades (2012). Estos datos son corroborados por Lafortune & Tessada, que corresponde a nuestro estudio más actualizado, en el que se realizaron 2 encuentas: una telefónica y otra presencial, llegando mediante ambos levantamientos a la obtención de datos de 581 migrantes. De esta manera, el estudio indica que actualmente un 53 % posee trabajo dependiente estable frente a un 35 % que se encuentra desempleado, y solo un 5 % declara poseer trabajo estable independiente. Además, es interesante observar que un 67% declara una mejoría de su situación laboral en Chile desde su llegada al país, incluso en aquellos con una estadía menor a 6 meses (2016).
Estas últimas cifras de Lafortune & Tessada son interesantes al contrastarlas con las fuentes anteriores, ya que si bien la inclusión no ha avanzado completamente para ser inmediata y plena con respecto al espacio laboral, sin embargo, no es menor la mejoría de este campo en los migrantes, incluidos los que llevan menos de 6 meses en el país. Aquí queda la limitación e interrogante del por qué de aquella alza positiva en el espacio laboral. Surgen preguntas, tales como: ¿El origen de los migrantes interregionales se ha diversificado? ¿Estamos siendo más tolerantes con los migrantes? Estas interrogantes surgen porque no se pueden responder desde fuentes poco vigentes, como la mayoría de las consultadas en esta revisión. El énfasis se ha puesto en la inclusión desde el factor laboral, pues es unos de los principales motivos de la presencia de migrantes en nuestro país, y por tanto, un modo objetivo de medir la inclusión.

Discriminación según la procedencia.Macarena Machín, basándose en datos del estudio realizado por la fundación ideas el año 2009, identifica “la nacionalidad” como la segunda categoría o causa de discriminación. Asimismo, la misma autora recogiendo una encuesta del año 2003 elaborado por la Universidad Diego portales, nos presenta que los niveles mínimos de afinidad, con respecto a los migrantes, los chilenos lo experimentan con los ciudadanos de origen peruano y boliviano (2012). Por su parte, Madero & Mora del Valle (2011) dirán que “uno de los atributos sociales que más relevancia tiene en las trayectorias de inmigrantes corresponde a la segmentación de individuos en virtud de atributos fenotípicos y del origen nacional” (p.150). Entonces, según Madero & Mora este atributo social aparece claramente en las personas de origen peruano, condicionada por esa percepción del chileno frente al otro distinto, la otredad. Por otro lado, Aravena & Alt (2012), desde los datos obtenidos por los grupos de discusión con jóvenes migrantes, dirán que esta población percibe “diferencias de trato y sanciones sociales basadas en su origen extranjero” (p. 135), enfocándose dicha desigualdad en la población peruana, ya que el chileno en ciertos momentos y lugares ha peruanizado la inmigración (Aravena & Alt, 2012).
Nuestra fuente más actualizada de Lafortune & Tessada, no presenta una cifra sobre la población migrante con mayor índice de discriminación. Sin embargo, nos da cuenta de que casi la mitad de los encuestados en este estudio corresponden a migrantes de origen peruano, esto es, un 47,8%, cifra cercana a los datos oficiales (UN, 2014) que indican un 53% de peruanos en relación al total de migrantes en nuestro país (2016). Desde este horizonte y considerando que la muestra sobre los mismos encuestados arroja un 35% de desempleados y un 3% de migrantes con trabajo temporal estable, podríamos sospechar que un número considerable de peruanos (correspondientes al 47% de los encuestados) ocupa gran parte del rango de desempleados, y por tanto de la población con menos inclusión, producto de la discriminación.
De esta manera, habiendo consensuado nuestras fuentes sobre la relación entre procedencia y racismo, sobretodo en la población peruana, podemos decir que ellos -los peruanos- se identifican en menor medida con aquel constructo mental, histórico y político del fenotipo chileno. Dentro de las características reunidas por este fenotipo se encuentra la procedencia que se hace evidente por el color de piel. Por eso, al momento de la inclusión laboral, ésta no se concreta en base a criterios relacionados con el capital humano y social sino referido al origen o procedencia, lo que conduce a una inclusión informal de los migrantes (Madero & Mora del Valle, 2011). Por este motivo, Tijoux & Palominos comentan que los estudios sobre este fenómeno identifican tres momentos migratorios en la historia de nuestro país, siendo fundamental para la comprensión de la relación procedencia- racismo, el primer momento, es decir, la migración ultramar durante la colonia, pues aquí se asientan las bases para cierta racialización. El discurso de blanquitud fue utillizado en Europa para la construcción de las naciones, y luego se importo a nuestro país, reconociendo en los colonos superioridad, pues ellos nos brindarían los elementos necesarios para el desarrollo cultural, científico, moral y religioso (2015, p. 249).
Entonces, es curioso y comprensible, por ejemplo, la actitud negativa de los ciudadanos chilenos en Arica con respecto a las personas de origen peruano, pues existen razones históricas- políticas para justificar dicha actitud, pero al mismo tiempo una ascendencia común que invita a la convivencia social. Machín, recogiendo datos del estudio “Plan Arica”, dice que un 53% de los ariqueños considera negativa la presencia de peruanos en la ciudad.

Conclusión.A partir de la evidencia bibliográfica presentada, se puede concluir que la percepción mayoritaria de los chilenos con respecto a los migrantes es negativa, por ser considerada un fenómeno que afecta a la identidad, al orden social y a la ocupación de las plazas laborales. Sin embargo, según otros datos esta percepción estaría variando en las nuevas generaciones. Lo  anterior es corroborado en la baja inclusión de los migrantes a través del espacio laboral, pues debido a los deficientes mecanismos institucionales, la mayoría comienza insertándose informalmente en el mundo laboral. Finalmente, esta falta de inclusión esta regida por un paradigma histórico de comprensión nacionalista, que permite estratificar a los individuos de la sociedad considerando solo a algunos como superiores y constructores de desarrollo.Por lo tanto, desde lo dicho se puede afirmar que efectivamente existe una relación entre procedencia y racismo, manifestada en la estigmatización social que tenemos de cada grupo migrante como producto del fenotipo, pero esto se vuelve más grave al considerar que este racismo ha dejado resabios culturales en el modo de comprender y legislar nuestra nación, pues aún las políticas integrales de inclusión siguen siendo deficientes.Esta revisión bibliográfica pretendió recoger datos para consensuar o no la relación investigada. Sin embargo, queda la limitación de tener insuficientes estudios o datos actualizados sobre la percepción chilena y migrante de la inclusión, para medir los grados de racismo aún latentes. Por lo mismo, surgieron preguntas, tales como ¿Estamos siendo más tolerantes con los migrantes? ¿O es que hemos encontrado más sintonía con aquellos nuevos migrantes?.

Referencias Bibliográficas
1. Aravena A, Alt C. (2012). Juventud, migración y discriminación en el Chile contemporáneo. Revista última Década, 20 (36), 127-140.http://dx.doi.org/10.4067/S0718-22362012000100006 

2. Lafortune J, Tessada J. (2016).  Migrantes Latinoamericanos en Chile: Un panorama de su integración social, económica y financiera (BID 488) Recuperado de Banco Interamericano de desarrollo: https://www.cepchile.cl/cep/site/artic/20161214/asocfile/20161214112849/jeanne_lafortune_jose_tessada_migrantes_latinoamericanos_en_chile.pdf 

3. Madero I, Mora C. (2011). Capital Social e Inclusión Laboral: Una aproximación a las trayectorias de ascendencia laboral de migrantes Peruanos en Chile. Polis, Revista de la Universidad Bolivariana, 10 (29), 147-163. http://dx.doi.org/10.4067/S0718-65682011000200007

4. Machín, M. (2012). La percepción de la migración en Chile; Áreas de intervención. En Los derechos humanos y la migración Chile (Cap. 1, 3). Recuperado de
https://webcache.googleusercontent.com/search?q=cache:0IjOTjHlfxoJ:https://observatorio.cl/wp-content/plugins/download-attachments/includes/download.php%3Fid%3D1072+&cd=3&hl=es&ct=clnk&gl=cl


5. Tijoux, María E. (2016). Racismo en Chile. La piel como marca de la inmigración. (1era edición) Santiago, Chile: Editorial Universitaria.

6. Tijoux M, Palominos S. (2015). Aproximaciones teóricas para el estudio de procesos de racialización y sexualización en los fenómenos migratorios de Chile. Polis, Revista Latinoamericana, 14 (42), 247-275.http://dx.doi.org/10.4067/S0718-65682015000300012 





Comentarios

  1. Hola Luis! Es un tema muy desafiante e interesante. Ahora tengo un par de sugerencias para el producto final. Se ve una estructura clara en la cual se puede identificar cada una de las partes de la revisión literaria. Pero en la introducción a pesar de que si se introduce la temática que se va a trabajar creo que falta una carta de navegación clara, te aconsejo profundizar en ella. Por ejemplo, en el texto se señala "analizaremos 6 fuentes cuantitativas y cualitativas sobre el fenómeno migratorio y así verificar la relación entre procedencia y racismo, mediante los siguientes pasos: la percepción de los chilenos sobre los migrantes, inclusión de los migrantes según el espacio laboral y discriminación según la procedencia." creo que este párrafo explica a rasgos generales cómo se estructura el ensayo, pero se puede profundizar e identificar en qué momento de la revisión se van a discutir esos puntos.
    Me gusta el uso de subtítulos ya que como lectora me ayuda a comprender la idea general de los párrafos y a clasificar la información que se entrega.
    En cuanto a la conclusión creo que cumple con el objetivo que se propone en la introducción y además se sugiere abrir investigaciones acerca de ciertas temáticas que se tratan en tu revisión de literatura y se mencionan limitaciones en tu investigación. En el último párrafo cambiaría la palabra "en esta revisión bibliográfica" por "en esta revisión literaria".

    Buen uso de la bibliografía y se ve una investigación en las temáticas que se trataron a lo largo de la revisión de literatura.

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  2. Luis, tu revisión de bibliográfica es clara y bien articulada. te sugiero en primera instancia agrandar la letra de tu escrito para que facilite la lectura, en segunda instancia respecto al contenido y a la estructura, presentas una introducción que contiene todos los elementos, sin embargo, podrías articular de mejor forma la carta de navegación, agregando conectores, en primer lugar, después, etc, de forma que se evidencie una progresión mas que apartados independientes.
    Con respecto al desarrollo, logras plantear las ideas de los autores y hacerlos dialogar, ahora bien, también seria interesante escuchar tu voz guiando la discusión para que no sea un resumen de los textos, del mismo al comenzar un párrafo intenta utilizar conectores como "en consecuencia", "ademas", "el segundo lugar, por un lado" antes de introducir un tema, todo esto se refleja en el párrafo que sigue del apartado Discriminación según la procedencia:
    "Macarena Machín, basándose en datos ...." . En este ejemplo se evidencia la introducción inmediata de los postulados del autor, sin un preámbulo previo que contextualice el tema a tratar.
    En relación a la conclusión, si bien agregas los elementos estructurales, podrías enriquecerla mas haciendo referencias a más elementos de tu trabajo y reflexionando sobre los próximos estudios.

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